Finanzas

Según las Naciones Unidas, más de 1.600 millones de personas alrededor del mundo, lo que equivale a un 25 % de la población mundial, habitan en viviendas carentes de condiciones adecuadas y requieren mejoras o ampliaciones. Específicamente en América Latina y el Caribe (ALC), el déficit de vivienda afecta casi al 40 % de la población total. De ellos, poco más del 60 % necesita hacer mejoramientos o ampliar su vivienda.

En Hábitat para la Humanidad tenemos claro que, en nuestra región, la necesidad de mejorar las viviendas es significativamente superior a la necesidad de construir casas nuevas. También sabemos que específicamente la población de ingresos bajos que necesita mejorar su vivienda queda excluida, en su mayoría, del sector financiero formal.

Nuestros estudios indican además que estas familias autoconstruyen o mejoran poco a poco su casa. El limitado acceso a financiamiento adecuado y realizando ellos mismos las construcciones de la vivienda sin una asesoría técnica profesional, ha generado que las familias incurran en altos costos y que tarden hasta 30 años en todo el proceso.

Es claro que estas familias requieren más que un préstamo para mejorar o construir su vivienda, ellos necesitan un acompañamiento total en el proceso. Ante esta realidad, en Hábitat analizamos la cadena de valor que tiene la construcción o mejoramiento de una vivienda para este sector de la población y con esa información, incidimos para que el sistema ofrezca productos y servicios que respondan a las necesidades, preferencias y capacidades de esas familias, y también, se consideren los incentivos para los actores que pueden facilitar este desarrollo.

Nuestro objetivo es que estas familias no sean excluidas del sector financiero formal y tengan la oportunidad de tener una vivienda segura y resiliente que les permita edificar un mejor futuro.